LA PESCA DEL CALAMAR

El equipo necesario para practicar la pesca del calamar, consistiría básicamente en una caña de acción ligera, las cañas específicas suelen marcar la acción de la caña en función del rango de señuelos que puede mover (como por ejemplo 1.8-3.0), de una medida comprendida entre los 240 cm y los 275 cm , un carrete cuyo tamaño oscile entre el 2000 al 3000, una línea que puede ser trenzada multifilamento con un PE de entre #0.6 a #0.10 o un nylon monofilamento cuyo diámetro esté entre el 0,20 mm y el 0,26 mm a poder ser de color de alta visibilidad y las jibioneras ( Poteras o jibidevones ) cuyas formas pueden ser básicamente de dos tipos, o en forma de pez o en forma de gamba de colores que variarán entre los realistas si pescamos durante el día o en aguas muy claras y los colores brillantes ( Rosa, rojos, naranjas, multicolores…) si pescamos de noche o en aguas turbias, con unos tamaños comprendidos entre los 1.5 y los 4.0 dependiendo del tamaño de los cefalópodos que pretendamos pescar.

Los escenarios de pesca son cada vez más variados, ya que si bien antes, casi el 100% de los pescadores se decantaban por acudir a puertos y espigones, ahora son muchos los que optan por pescar en playas o incluso en zonas de rocas, además también la pesca desde embarcación suele dar muy buenos frutos para pescar estas especies. 

En cuanto a las horas más idóneas para tentar los cefalópodos con nuestras cañas, dependerá un poco del lugar y la hora donde vayamos a pescarlos ya que estos animales se sienten atraídos por las zonas con luz una vez caída la noche, así si las horas a las que vamos a ir de pesca son nocturnas, lo puertos y espigones con farolas, son los lugares más adecuados, mientras que si pretendemos atraparlos durante el día, cualquier lugar con fondos arenosos serán lugares propicios siendo las hora de mayor actividad el atardecer y el amanecer, aunque también podremos tener ataques a plena luz del día.